jueves, 16 de septiembre de 2010

RESEÑA HISTORICA DEL FOLCLOR DE LA COSTA ATLÁNTICA, EN ESPECIAL EL MAPALÉ.

Se entiende por folclor aquello  que son saberes populares, costumbres de un pueblo, hechos tradicionales, vivencias de un grupo étnico específico, manifestaciones autóctonas que caracterizan a cada pueblo.
Teniendo en cuenta lo anterior el folclor no es una abstracción de la realidad si no una plasmación de la misma. Es como la historia cotidiana escrita en un lenguaje figurado. Y en la medida en que las condiciones sociales, materiales o espirituales cambian, así el hecho folclórico va recogiendo y reflejando el transcurrir de la colectividad. Todas estas manifestaciones, dejan su huella en el canto, la música, la danza,  y la poesía con el sello propio de la tradición.
Los investigadores han hecho cuatro (4) ramas del folclor: folclor literario, folclor musical, folclor coreográfico y folclor demosófico.
El folclor musical diferencia las tonadas y cantos, los indígenas de los mestizos (Andinos y llaneros) y los mulatos (litoral atlántico y pacífico) en la costa atlántica los elementos que hacen parte del folclor son muchos y entre ellos tenemos el mapalé. Este elemento del folclor de la costa atlántica tiene una ascendencia africana propia del litoral Caribe. En sus comienzos fue una danza de trabajo ejecutada en las noches amenizadas con toques de tambores, las palmas de las manos y el canto. Este ritmo fue traído por los negros bozales del golfo de guinea a nuestra costa donde la asimilamos dándole las características peculiares.
El mapalé es un baile de pareja suelta; sin coreografía definida; sus movimientos son frenéticos  y eróticos con base en saltos, caídas, contorsiones, espasmos, zarandeo, arrastradas, encuentros, fugas y enfrentamientos entre mujeres y hombres. En los individuales, cada parejo trata de hacer sus propias figuras, con el fin de agradar a su pareja y lucirse ante los demás bailarines y ante el publico presente. La mujer tiene movimientos un poco diferentes a los del hombre, más excitantes y eróticos. En la actualidad han aparecido muchas figuras nuevas de tendencias acrobáticas, las cuales no se pueden considerar folclóricas aunque puede que con el tiempo varias de ellas se incorporen al patrimonio tradicional como aporte de la generación actual.